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¿Cuáles son los beneficios del esquí alpino o ski?
Todo lo que necesitas saber sobre el esquí alpino
¿Cuáles son los beneficios del esquí alpino o ski? Utiliza la siguiente herramienta para descubrir rápidamente los beneficios de esquiar en una pista o estación de ski. Así podrás comprobar si este deporte responde a tus expectativas y objetivos personales.
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Más información sobre el esquí alpino
¿El esquí alpino es bueno para la salud? ¿Es un buen deporte accesible a todos? Tanto si eres principiante como un esquiador experimentado, a continuación encontrarás una lista de los beneficios y problemas que puedes encontrar al practicar el esquí alpino.
¿Qué es el esquí alpino?
El esquí alpino es un deporte de nieve en el que el objetivo es descender lo más rápidamente posible por una pendiente cubierta de nieve. Se practica utilizando esquís totalmente sujetos a botas específicas y bastones para mantener el equilibrio.
Se originó en Escandinavia hace algo más de 3 000 años. Accesible desde una edad muy temprana, este deporte al aire libre ofrece muchos beneficios físicos y psicológicos. Desde principiantes hasta expertos, hay algo para todos, sobre todo porque abarca varias disciplinas diferentes (descenso, eslalon, eslalon gigante, super-G, combinada y estilo libre).
Beneficios y ventajas
El esquí alpino es un deporte estimulante con muchos beneficios. He aquí algunos de ellos:
- El esquí alpino mejora el equilibrio, la agilidad y la coordinación
- El esquí alpino te da una sensación de libertad y bienestar
- El esquí alpino tonifica el cuerpo y ayuda a quemar grasas
- El esquí alpino estimula el sistema inmunitario
- El esquí alpino mejora los reflejos y la toma de decisiones
Inconvenientes, desventajas y efectos nocivos
Aunque el esquí alpino es accesible a todos, no se recomienda en determinados casos (insuficiencia respiratoria, problemas cardiovasculares, embarazo, trastornos neurológicos o psicológicos, niños menores de 18 meses, diabetes descompensada, etc.).
En caso de duda, es aconsejable pedir consejo médico. Además del esfuerzo físico que supone, esta disciplina se practica generalmente a más de 1 500 metros de altitud, lo que somete al organismo a una dura prueba. Fatiga, migrañas, dificultad para respirar o falta de sueño: la escasez de oxígeno puede tener consecuencias más o menos perjudiciales para tu salud.
Las patologías más frecuentes son los problemas musculares y tendinosos, los esguinces, las fracturas y las lesiones de los miembros superiores e inferiores. El esquí alpino también requiere un alto nivel de forma física, lo que hace casi obligatorio un entrenamiento físico previo. Por último, hay que tener en cuenta que algunas personas pueden sufrir hipotermia. Por eso es importante mantenerse bien abrigado e hidratado.
