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¿Estás engordando sin saber por qué? ¿Pero se puede engordar sin comer mucho? Sí, algunas personas engordan sin comer más. Hay muchos factores que pueden contribuir a un aumento de peso inexplicable y en los que quizá no hayamos pensado: un estilo de vida sedentario, la edad, desequilibrios hormonales, estrés, depresión, ciertos medicamentos, dormir mal… Cuando analizamos el asunto, nos damos cuenta de que siempre hay una razón, no siempre obvia, para engordar esos kilos de más.
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Motivos de un aumento de peso inexplicado
Si tus hábitos alimentarios no han cambiado pero has engordado de repente, puede deberse a un cambio en tu comportamiento, hábitos o estilo de vida. Hay muchas causas de aumento de peso en las que no siempre pensamos.
Falta de ejercicio
Si no has cambiado tu forma de comer, quizá el aumento de peso se deba a la falta de ejercicio. Un estilo de vida sedentario es un factor de aumento de peso. En este caso, tu ingesta de calorías es mayor que tu gasto energético, por lo que las calorías que no quemas se almacenan en tu cuerpo en forma de grasa. Por tanto, tu balance energético está desequilibrado, y por eso engordas. Para evitar engordar, tu ingesta calórica debe ser equivalente a tu gasto energético.
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Cambios hormonales
El desequilibrio hormonal también puede ser la causa de unaumento de peso rápido e inexplicable.
En las mujeres, un cambio de píldora o de método anticonceptivo, la premenopausia o la menopausia pueden provocar un aumento de peso debido a un cambio en el nivel de estrógenos en la sangre.
La disfunción tiroidea, la glándula responsable de regular las hormonas, también puede provocar un aumento de peso. En este caso, es importante comprobar que tu tiroides funciona correctamente haciéndote un análisis de sangre.
En los hombres, a partir de los 50 años, el descenso de la testosterona provoca una pérdida de masa muscular y favorece el almacenamiento de grasa.
Alimentación emocional
Comer emocionalmente es una causa frecuente de aumento de peso inexplicable. Comer emocionalmente implica comer para llenar un vacío y calmar una emoción, como la ira, el miedo o la tristeza. También puede ser consecuencia delestrés, la ansiedad o la angustia.
Para deshacernos de nuestras emociones, tendemos a comer en exceso, sobre todo alimentos ricos en grasa y azúcar, y a menudo sin darnos cuenta realmente. Esto suele provocar un aumento de peso.
En este caso, es aconsejable optar por la técnica «Mindfulness», que consiste en comer «con atención» para evitar «comerte tus emociones». Este método te permite prestar más atención a tus hábitos alimentarios, para que seas más consciente de lo que comes.
Esta sobrealimentación emocional puede provocar trastornos alimentarios como la bulimia. Por eso es aconsejable consultar a un médico en caso de problemas graves.
Edad
Sí, ¡la edad puede hacer nos engordar!
El aumento de peso a medida que envejecemos puede explicarse por una reducción de nuestra tasa metabólica basal (número de calorías quemadas en reposo). Los estudios han demostrado que las personas mayores de 45 años pierden una media de casi el 10% de su masa muscular cada diez años.
Como sabes, la masa muscular tiene un impacto directo en la tasa metabólica basal. Cuanto más musculoso eres, mayor es tu tasa metabólica basal y más calorías quema tu cuerpo en reposo. En consecuencia, la pérdida de masa muscular con la edad conduce a una tasa metabólica basal más baja.
Por tanto, si la ingesta de calorías sigue siendo la misma, las calorías no quemadas se almacenarán, desencadenando un aumento de peso.
Falta de sueño
Las investigaciones han demostrado que si no duermes lo suficiente, engordas. ¡Kilos superfluos acumulados inconscientemente!
De hecho, según los estudios, cuando nos falta sueño, las hormonas del apetito se desregulan. Esto provoca un aumento de los niveles de grelina (la hormona que estimula el apetito) y una reducción de los niveles de leptina (la hormona de la saciedad). Según un metaanálisis de estudios sobre las consecuencias de la privación parcial de sueño, dormir poco lleva a ingerir más alimentos grasos y menos proteínas (sin variación para los hidratos de carbono) , lo que representaría 400 calorías extra, en comparación con las personas que duermen lo suficiente.
Toma de medicamentos
Puede que no lo sepas, pero algunos medicamentos pueden provocar un aumento de peso. En general, este efecto indeseable se indica en el prospecto del medicamento, pero no siempre somos conscientes de ello.
Algunas clases de medicamentos tienen más probabilidades que otras de asociarse a unos kilos de más. Es el caso de ciertas píldoras anticonceptivas, la cortisona, los somníferos, los antidepresivos, etc. En todos los casos, te recomendamos que consultes a tu médico si experimentas un aumento de peso inexplicable.
¿Cómo evitar engordar unos kilos sin razón aparente?
¡Algunos consejos para evitar engordar sin motivo aparente!
La buena noticia es que hay muchas formas de controlar tu peso. Aquí tienes unas cuantas:
- Consejo 1: Ajusta tu dieta según tus necesidades energéticas diarias
- Consejo 2: Come mejor, favoreciendo los alimentos con alta densidad nutricional y evitando los de baja densidad calórica
- Consejo 3: No comas cuando no tengas hambre
- Consejo 4: Duerme lo suficiente, entre 7 y 9 horas por noche
- Consejo 5: Come con atención para evitar comer emocionalmente
- Consejo 6: Actividad física regular para aumentar tu tasa metabólica basal
- Consejo 7: Consulta a tu médico sobre cualquier aumento de peso relacionado con la toma de medicamentos
